En un nuevo y grave episodio de ataques contra la población de Yemen, el Aeropuerto Internacional de Saná, una infraestructura esencial para el país, fue blanco de una serie de ataques aéreos de Israel y Estados Unidos.
Los bombardeos que tuvieron lugar este martes apuntaron directamente contra el Aeropuerto Internacional de Saná, una acción que se produce en respuesta a los ataques de los hutíes a Tel Aviv en respaldo a la lucha del pueblo gazatí contra el Estado sionista de Israel, que hace más de dos meses mantiene un cerco total al enclave palestino ocupado.
Según una fuente local citada por la Agencia de Noticias Yemenita (Saba), la agresión estadounidense-israelí no solo alcanzó el aeropuerto, sino que también tuvo como objetivo la Central Eléctrica de Dhahban, situada en el Distrito de Bani Al-Harith, y el área de Attan.
La oficina de prensa de los hutíes, por su parte, afirmó que los ataques del pasado lunes constituyeron una operación conjunta israelí-estadounidense.
Paralelamente a los ataques en Saná, el Ejército israelí llevó a cabo una operación a gran escala sobre la provincia costera de Hodeida, en el mar Rojo, lanzando más de 50 municiones con más de 20 aviones de combate.
Los rebeldes hutíes informaron que al menos seis ataques impactaron en el crucial puerto de Hodeida, mientras que otros alcanzaron una fábrica de cemento en el distrito de Bajil.
Frente a esta escalada, el jefe de la oficina de medios de comunicación hutíes, Nasruddin Amer, afirmó que las «incursiones agresivas sionista-estadounidenses contra instalaciones civiles no afectarán sus operaciones militares”.
Amer comunicó que los hutíes responderán a la agresión e intensificarán sus acciones, declarando que no dejarán de atacar las rutas marítimas a Israel hasta que el Ejército sionista detenga sus acciones militares contra Gaza.
Fuente: teleSUR