China solicitó a la nación estadounidense que se asegure «de manera efectiva los derechos y los intereses legítimos de los estudiantes internacionales, entre los cuales se encuentran los chinos».
El jueves, Pekín desestimó la promesa del gobierno estadounidense de anular las visas de estudiantes de China, tildando la medida del presidente Donald Trump hacia estudiantes internacionales como «discriminatoria y política».
Esto ocurrió después de que la administración de Trump informara el miércoles que cancelará los permisos para estudiantes provenientes de China, quienes representan una de las principales fuentes de ingresos para las universidades en Estados Unidos, marcando así un nuevo ataque a la educación superior en el país.
Además, Washington planea revisar los criterios de visas para hacer más estrictos los controles sobre todas las solicitudes futuras desde China y Hong Kong, señaló el secretario de Estado Marco Rubio.
La representante del Ministerio de Relaciones Exteriores, Mao Ning, describió esta medida como «ilógica».
«Estados Unidos ha anulado de manera ilógica las visas de los estudiantes chinos bajo la justificación de ideología y la defensa de los derechos nacionales», afirmó la representante del Ministerio de Relaciones Exteriores de China durante una rueda de prensa.
«Esta conducta política y discriminatoria de Estados Unidos ha revelado las falsedades sobre la libertad y la apertura que el país ha promovido, además de perjudicar aún más su imagen global, nacional y su credibilidad», declaró la portavoz de China.
En respuesta, el miércoles, China solicitó a Estados Unidos que asegure «de manera efectiva los derechos y el bienestar legítimos de los estudiantes internacionales, incluidos aquellos de China».
Rubio intensificó su enfoque en implementar restricciones a estudiantes internacionales tras la crítica de China a su decisión de pausar temporalmente la evaluación de visas para estudiantes en todo el mundo.
Previo a estas medidas, la administración de Trump ya había intentado revocar el permiso para todos los estudiantes extranjeros en la Universidad de Harvard, que se opone contundentemente a la presión del presidente.
Los alumnos de China, que abonan cuotas educativas que ascienden a decenas de miles de dólares, representan una de las principales fuentes de financiamiento para las instituciones educativas en Estados Unidos.
Durante el periodo académico 2023-24, había más de 277. 398 estudiantes de China matriculados, posicionándose en el segundo puesto después de los indios, según un reporte del Instituto de Educación Internacional apoyado por el Departamento de Estado.
Durante su primer mandato, Trump también centró su atención en los estudiantes chinos, pero se enfocó en aquellos que cursaban disciplinas consideradas delicadas o con relaciones con el Ejército.
FUENTE: NTN24