La posición adoptada por Bolivia se une a un número cada vez mayor de voces en la comunidad internacional que condenan el uso de la fuerza como mecanismo para imponer agendas geopolíticas.
El Gobierno del Estado Plurinacional de Bolivia manifestó una firme condena ante el reciente ataque aéreo llevado a cabo por Estados Unidos contra infraestructuras nucleares estratégicas en Irán.
El gobierno liderado por el presidente Luis Arce calificó este ataque como un acto hostil que representa una amenaza directa a la paz mundial y una clara violación del Derecho Internacional.
Mediante sus redes sociales, Arce expresó su repudio a la agresión, afirmando que “bombardear objetivos de esta índole no solo pone en peligro la estabilidad regional y global, sino que también transgrede principios fundamentales del Derecho Internacional y de la Carta de las Naciones Unidas”.
La Cancillería boliviana, por su parte, difundió un comunicado en el que calificó la intervención militar de Estados Unidos como un acto injerencista que vulnera la soberanía del pueblo iraní. “Esta acción representa una grave transgresión al Derecho Internacional y a los principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas”, destacó el texto.
El Ministerio de Relaciones Exteriores hizo un llamado a cesar las hostilidades y advirtió sobre las posibles repercusiones de estas acciones militares en la seguridad y la estabilidad de toda la región del Medio Oriente.
“Bolivia reitera su firme compromiso con la paz, el diálogo entre las naciones y el respeto absoluto al Derecho Internacional”, concluyó el pronunciamiento oficial.
El ataque, ejecutado por las fuerzas armadas de Estados Unidos, tuvo como objetivo tres instalaciones clave del programa nuclear iraní: Fordow, Natanz e Isfahán.
La operación fue anticipada por el presidente Donald Trump a través de sus redes sociales, lo que evidenció una intención deliberada de intensificar el conflicto, en coordinación con el régimen sionista de Israel.
Con esta postura, Bolivia se suma a una creciente ola de condenas internacionales que rechazan el uso de la fuerza como instrumento para imponer agendas geopolíticas, y reafirma su respaldo al derecho soberano de Irán a desarrollar su programa nuclear con fines pacíficos.
FUENTE: telesurtv.net