Deslizamiento en La Mica expone debilidades en el sistema de agua de QuitoMoradores del sur de Quito recolectan agua de un tanquero.

Ochenta y ocho mil viviendas en el sur de Quito carecen de agua debido a un deslizamiento de tierra en Antisana.

Moisés Cáceres

El deslizamiento que tuvo lugar el 9 de julio de 2025 en el páramo del Antisana dañó cuatro kilómetros de la tubería del sistema La Mica–Quito Sur y privó de agua a más de 400 000 personas. Este suceso generó interrogantes sobre la escasez de preparación, la debilidad de las instalaciones y la carencia de opciones que aseguren la continuidad del suministro.

El sur de Quito exige agua en medio de la emergencia

En las comunidades de La Ecuatoriana y Caupichu, ubicadas al sur de Quito, se observa una escena similar: individuos con cubos, bañeras y garrafones aguardan a los camiones de agua en las aceras.

En La Ecuatoriana, los habitantes comentaron que a las 10:00 del 16 de julio de 2025 llevaban una hora aguardando un camión cisterna, tras oír el rumor de que uno pasaba por la zona. “No existe un horario establecido”, expresó Santiago Arango, propietario de un restaurante. Entre el grupo, fue quien más detalló la situación; los otros lo apoyaron con comentarios como: “Es increíble”.

En su calle, los residentes optaron por contratar un camión cisterna privado esta semana. El costo fue de 70 dólares. Arango necesita al menos 300 litros cada día para lavar sus utensilios, cocinar y permitir que sus clientes usen el baño. “A veces tengo que ir hasta la Lucha de los Pobres para conseguir agua en la casa de mi mamá. Mis hijos también se bañan ahí”, contó él.

Otro vecino, que prefirió no revelar su identidad, mencionó que viaja en carro hasta Quitumbe, donde vive su madre, para recoger agua y llevarla a su hogar, situado en la calle Clemente Concha.

En Caupichu, una mujer mayor solicitó tanqueros de mayor tamaño. A las 12:00 llevaba una hora esperando en la Unidad de Policía Comunitaria (UPC) del lugar. Un camión cisterna arribó antes de lo programado. El personal municipal explicó que, a pesar de que el horario indicaba atención por la tarde, llegaron antes al saber que había vecinos esperando en condiciones de calor.

El agua no fue suficiente para todos. Las autoridades prohibieron el ingreso a la UPC para regular la distribución. En el sitio, el personal de la Secretaría de Seguridad comunicó que implementarán un sistema para repartir 10 000 litros a partir de las 18:00 de este miércoles 16 de julio de 2025. Además, anunciaron que un nuevo tanquero arribaría a las 14:30.

Deslizamiento en La Mica expone debilidades en el sistema de agua de Quito

Moradores de La Ecuatoriana esperan a la llegada de los tanqueros.

Lluvias extremas y terreno pantanoso provocaron la emergencia de agua en Quito

De acuerdo con Schubert Rosero, quien lidera el Departamento de Ingeniería de Proyectos de Epmaps, el colapso tuvo lugar en un área inundada, a cuatro kilómetros del embalse de La Mica. «Entre junio y julio, las lluvias fueron un 91% más elevadas de lo habitual en la región oriental. El equipo realiza inspecciones, pero identificar problemas en 42 kilómetros de tubería es complicado», comentó.

Rosero afirmó que era imposible contener 600 000 metros cúbicos de barro. Por esta razón, opinó que no se podía evitar el deslizamiento. En el área afectada se realiza una excavación hasta llegar a un terreno sólido para instalar la nueva tubería y resguardarla de eventuales situaciones parecidas.

No hay garantía de que no vuelva a pasar

Christian Rivera, especialista en administración de riesgos, planteó dudas sobre la carencia de un enfoque proactivo. Recordó que se llevó a cabo la instalación de una tubería elevada para salvaguardar el sistema ante una posible erupción del Cotopaxi. “Es posible modificar rutas para disminuir los peligros derivados de deslizamientos. En esta ocasión no había un plan completo”, comentó.

Rivera advirtió que no hay informes precisos acerca de la cantidad y la calidad del agua que reciben los ciudadanos a través de los camiones cisterna. “Sin supervisión, podría surgir una crisis intestinal que impacte a miles y cause el colapso de los hospitales. Esto se ha convertido en un espectáculo humanitario. No se trata solo de proporcionar agua, sino de asegurar condiciones adecuadas”, afirmó.

Falta un mapa de vulnerabilidades de servicios esenciales

Para Rivera, el gobierno tiene que reconocer que Quito es una ciudad capital que tiene servicios básicos susceptibles a riesgos naturales. «Un deslizamiento en el futuro podría impactar una planta eléctrica. Necesitamos un mapa nacional de vulnerabilidades que nos ayude a organizar nuestra respuesta», sugirió.

Asimismo, solicitó que se considere a grupos vulnerables como ancianos o personas con discapacidad, quienes no siempre tienen acceso a los lugares de suministro. Criticó que la distribución de agua no se organizó con fundamentos técnicos ni con criterios de justicia.

Deslizamiento en La Mica expone debilidades en el sistema de agua de Quito

Un habitante del sur de Quito empuja una carretilla con baldes vacíos para recoger agua.

Quito depende de un sistema frágil

José Salazar, profesor en la Facultad de Arquitectura e Ingenierías de la UISEK, estuvo de acuerdo en que la actividad reveló problemas estructurales. «No contamos con buenos planes de emergencia. Dependemos de un único sistema. Si se deteriora, todo se viene abajo», comentó.

Mencionó que se logró vincular el sistema La Mica con otros, como los de Paluguillo o Payac, con el propósito de mitigar los efectos. Además, sugirió la posibilidad de utilizar los acuíferos que se encuentran bajo la ciudad, como el de La Carolina, donde varios edificios extraen agua para prevenir inundaciones en sus niveles subterráneos.

“Muchas ciudades alrededor del mundo, como Madrid, emplean agua de acuíferos. Quito podría depurar esa agua y utilizarla como reserva”, afirmó. También advirtió que un gran sismo podría interrumpir todas las redes de agua que provienen de la cordillera oriental.

Epmaps activó seguros y prioriza interconexiones entre sistemas

Verónica Sánchez, directora de Epmaps, comunicó en el Concejo Metropolitano que se ha otorgado el contrato para la nueva tubería a Patricio Rodas por un total de 478 000 dólares. La compañía activó su póliza de seguro catastrófico para ayudar a cubrir parte de la respuesta.

Sánchez explicó que la operación de la planta Calderón facilitará la descongestión de los sistemas Bellavista y Puengasí. También mencionó que se llevará a cabo una interconexión entre la planta El Troje y Puengasí, como está previsto en el Plan Maestro.

Respecto a las plantas de potabilización que ofreció el Gobierno Nacional, comentó que Epmaps no tiene información sobre su ubicación exacta ni sobre la calidad del agua cruda utilizada. Subrayó que el sistema La Mica es monitoreado a través del sistema Scada y estaciones meteorológicas que registran las precipitaciones.

El Municipio analiza subsidios para vecinos que comparten agua

La Gerente mencionó que se está considerando otorgar un apoyo financiero a las familias que utilizan agua de redes domiciliarias en conjunto con sus vecinos. Asimismo, indicó que Epmaps tiene un Plan General de Respuesta al Riesgo, que se ha puesto en funcionamiento desde el comienzo de la emergencia, y que se está colaborando con el COE Metropolitano.

Robos y falta de asistencia agravan la emergencia en barrios del sur

En áreas como la parroquia La Ecuatoriana, los habitantes informaron sobre robos en el momento en que salían a recoger agua. De acuerdo a los relatos recabados en el sitio, individuos intentaron entrar a las casas después de envenenar a los moradores. “La comunidad actuó rápidamente. Los confrontaron y la Policía llegó pronto. Se difundieron imágenes de ellos”, declaró una vecina.
Los residentes también manifestaron que, a pesar de las promesas del Gobierno, estos delitos siguen ocurriendo. “Uno sale a buscar agua. Quedan en casa personas que no pueden moverse o que están solas”, comentó otra habitante.

Deslizamiento en La Mica expone debilidades en el sistema de agua de Quito

En la parroquia Caupichu, los moradores reciben agua de un tanquero del Cuerpo de Bomberos de Quito.

Personas vulnerables sin asistencia en La Ecuatoriana

Los habitantes de La Ecuatoriana pusieron en duda la administración del Patronato San José. Aunque el domingo 13 de julio comenzó un censo de individuos en situación de vulnerabilidad, solo se aceptaron inscripciones hasta las 08:00. Aquellos que no pudieron presentar su información quedaron excluidos de la lista.

Una vecina compartió la historia de una niña con discapacidad motora cuya familia no recibió asistencia. «La madre tiene gemelas y requiere ayuda. No envió la información a tiempo y no recibieron apoyo», comentó.

Desabastecimiento de agua en Ignacio Lecumberry

En la vía Ignacio Lecumberry, los camiones cisterna no aparecen a menudo. La última entrega se realizó el domingo. El miércoles 16 de julio, un camión cisterna arribó a las 10:00, pero no fue suficiente para todos. Una porción del líquido estaba destinada a otras áreas.
Los residentes de la zona fueron a buscar agua en lugares cercanos, como Davis Cevallos. “Todos requieren agua. A veces hay que caminar largas distancias con cubos y el transporte no siempre está disponible”, comentó una vecina.

FUENTE: ELCOMERCIO