Reino Unido amenaza con reconocer a Palestina como estadoreino unido Para Starmer, se trata de una acción destinada a reactivar el estancado proceso de paz.

El líder del partido laborista, Keir Starmer, manifestó que el reconocimiento depende de que Israel reanude la entrega de ayuda humanitaria de manera libre y sin limitaciones.

El líder del Partido Laborista, Keir Starmer, declaró este martes su deseo de formalizar el reconocimiento del Estado Palestino durante la próxima Asamblea General de la ONU, programada para septiembre, a menos que Israel tome “acciones significativas” para resolver la emergencia humanitaria en Gaza.

Además, se agregó a las demandas que Tel Aviv renuncie abiertamente a cualquier intención de anexar Cisjordania y que se comprometa a un proceso de paz auténtico y sostenible que lleve a una solución de dos Estados.

El Gobierno del Reino Unido es uno de los principales patrocinadores de la ocupación en Israel, y anualmente el Comité Palestino Británico (BPC) establece la magnitud de la cooperación militar británica con Israel en relación con las responsabilidades legales que tiene el Reino Unido respecto a las «graves transgresiones» cometidas por Israel en el ámbito del derecho humanitario internacional y los derechos humanos.

De acuerdo con el informe, Londres no ha sido el responsable directo de la violencia en Gaza, sin embargo, ha tenido un «impacto significativo, no solo mediante la aprobación de licencias para armas, sino también a través de una «cooperación militar más extensa y sólida con Israel, según un documento reciente.

Respecto a las palabras del líder del Gobierno británico, estas fueron pronunciadas tras una reunión especial del gabinete británico, que se llevó a cabo durante un receso parlamentario. Downing Street defendió este cambio de posición al destacar la «intolerable» situación que sufren los palestinos y la falta de cualquier posibilidad de lograr un acuerdo justo.

De todas formas, el presidente moderó el mensaje del anuncio, y indicó que en una plática reciente con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se dejó claro que el reconocimiento no será un apoyo absoluto a Palestina, sino un esfuerzo por fortalecer las bases de la conversación y proteger el derecho internacional.

Sin embargo, condicionó el retraso del reconocimiento a que Israel restablezca la ayuda humanitaria de manera ilimitada, abandone de forma manifiesta cualquier plan de anexión en el Valle del Jordán y reanude la comunicación con la Autoridad Palestina.

Al mismo tiempo, el líder laborista recalcó que no equiparaba al Estado israelí con el grupo de la Resistencia Armada de Palestina Hamas, al que responsabilizó por los ataques del 7 de octubre de 2023.

Así mismo, reiteró sus demandas relacionadas con la liberación inmediata de todos los prisioneros, el fin de las hostilidades, la entrega completa de las armas y la exclusión de cualquier participación en un futuro gobierno en Gaza.

Este comunicado se produce después de las recientes declaraciones del presidente francés, Emmanuel Macron, quien también mostró su apertura a reconocer al Estado palestino, lo que ha intensificado la presión diplomática sobre Tel Aviv. La alineación entre Londres y París representa un reto directo a la postura dura del Gobierno israelí y podría intensificar su aislamiento en el ámbito internacional.

Desde la Unión Europea, se filtró que la exclusión de Israel de ciertos programas de investigación comunitarios actuó como una advertencia, aunque el apoyo de Estados Unidos ha sido el factor determinante. Tras su encuentro con Starmer, el presidente Donald Trump sorprendió al referirse a la situación en Gaza como una «hambruna» y solicitó un aumento en los esfuerzos de asistencia humanitaria. Este cambio en la postura estadounidense facilita la propuesta británica.

Sin embargo, el plan del Reino Unido no estuvo exento de críticas. Aunque Jordania y Egipto manifestaron su intención de reabrir corredores humanitarios, persisten interrogantes sobre la capacidad de Israel para asegurar la seguridad de dichas operaciones y prevenir nuevas interrupciones. La reconstrucción de infraestructuras esenciales y la protección del personal humanitario dependerán finalmente de la disposición del Gobierno israelí, que hasta ahora ha desoído numerosas resoluciones de la ONU.

Con más de 60. 000 muertos y miles de desplazados en Gaza, según fuentes locales y organizaciones independientes, la posible decisión británica cobra tanto un peso simbólico como político.

Para Starmer, se trata de un movimiento destinado a reactivar el proceso de paz estancado; para muchos palestinos, podría simbolizar un avance hacia el reconocimiento completo de su derecho a la autodeterminación.

FUENTE: TELESURTV