La Policía Municipal de Guayaquil, en colaboración con empleados de la Agencia Nacional de Regulación, Control y Supervisión Sanitaria (Arcsa), confiscaron 500 mil mascarillas en el corazón de la ciudad.
Sucedió durante una acción de seguridad en las cercanías de La Bahía, en vías como Manabí, Rumichaca, Lorenzo de Garaicoa, Capitán Nájera, Chimborazo y coronel. En empresas de distribución e importación descubrieron mascarillas quirúrgicas para adultos y niños con un registro sanitario expirado y costos altos.
Juan Zambrano, oficial de la Zona 8, indicó que en las bodegas donde se guardaban diversos paquetes de materiales se encontraban excrementos de roedores. Los establecimientos fueron cerrados.
«No se puede permitir que donde se almacene productos destinados a uso humano existan excrementos de roedores.» Es serio y esto amenaza la salud pública», expresó.
En consecuencia, Arcsa cerró los establecimientos, una medida que podría prolongarse hasta 30 días. Los dueños tienen la obligación de abonar hasta 10 salarios básicos.
Sobreprecio de mascarillas fue comprobado
Imagen de mascarillas con registro sanitario caducado. Foto: API
Además de la ausencia de registros de salud, los controles revelaron aumentos desmedidos en los costos. Se descubrió que el precio de una caja de mascarillas oscilaba entre USD 1,75 y USD 4, principalmente en las zonas exteriores donde opera el comercio informal, impactando de manera directa en la economía de los usuarios.
Frente a esta anomalía, los ciudadanos manifestaron su apoyo a las medidas tomadas por las autoridades, subrayando la relevancia de evitar la especulación en periodos de elevada demanda.
Fuente: Ecuavisa