Uleam Radio.- Willian Pacho honra la memoria de su madre Glenda, fallecida en el 2019. El futbolista ecuatoriano fue escogido en el 11 ideal de la FIFA, en la jornada del 16 de diciembre del 2025. Es el único jugador sudamericano de la nómina. ‘Pachito’ dedica todos sus logros a su progenitora. Esta es su historia:
El llanto era desgarrador, desconsolado. Willian Pacho entró al camerino del estadio General Rumiñahui, la vieja casa de Independiente del Valle, cuando recibió una noticia que estrujaría su corazón, que lo cambiaría todo: su madre había fallecido, esa mañana.
Era el 2 de noviembre del 2019. Independiente del Valle igualó 0-0 con Delfín, en la fecha 30 del torneo. El técnico Miguel Ángel Ramírez utilizó suplentes, pues una semana después ganaría la Copa Sudamericana ante Colón de Santa Fe .
Uno de los juveniles que debutó ese día en cancha fue Willian Pacho, actual jugador del PSG de Francia y reciente ganador de la Champions League. Lo que se esperaba sea un día de celebración, se convirtió en una jornada gris.
Sonia y Gisella, las hermanas de Willian Pacho, decidieron esperar hasta el final del partido para compartir la noticia. El DT Ramírez y Efrén Mera, entonces jugador de IDV contuvieron al juvenil, que no dejaba de llorar y lamentarse.
Willian Pacho señala una camiseta con la imagen de su madre Glenda. La fotografía corresponde a febrero del 2020, cuando IDV ganó la Copa Libertadores juvenil Sub 20Diario Expreso
Desde aquel momento, Pacho decidió transformar el dolor en motivación. Su madre hizo esfuerzos para que él saliera de Quinindé para convertirse en jugador profesional. El defensa decidió fortalecerse y triunfar por ella.
Glenda murió a los 51 años. En el fútbol ecuatoriano, durante varios años, los juveniles usaban números inusuales como el 50, 51 y 52 para ser identificados en su condición de novatos. Pacho usaba la 52, pero decidió adoptar la 51, como la edad de mamá.
En el PSG, Pacho brilló con el número 51. Cuando en París le preguntaron el por qué del peculiar número evocó a Glenda y los años que tenía cuando su vida terminó. Pero el dorsal no es el único recuerdo que tiene el crack en su uniforme.
El defensor tricolor tiene a una imagen de su madre en las canilleras. Personalizó una fotografía de Glenda y posó orgulloso con el elemento de equipamiento y el trofeo de la Champions League, en mayo del 2025, cuando París Saint Germain conquistó el trofeo ante Inter de Milan.
El defensa busca más gloria. Quiere honrar a su madre, la guerrera que le enseñó la determinación y la importancia de abrazar los sueños. Ya está en el 11 ideal del mundo, como el mejor defensa zurdo. El 2026 jugará el Mundial con la Tricolor.
Fuente: Teleamazonas

